Opuestos

Dos titanes en lucha permanente, el fuego y el agua se combaten en conflicto eterno. Por opuestos se odian, se repelen y en mortal paradoja se enfrentan. Pero de este rencor nace un milagro natural, una fuerza creadora, imparable.
El agua quiere apagar y el fuego quiere evaporar, no lo saben, no se matan, se transforman.
Así como nosotros que somos dos y a veces somos uno...

Todo

¿Qué es todo?
Todo sos vos, soy yo, son ellos
Todo es un abrazo, un corazón, el alma
Todo es el universo entero (y a pedacitos)
Todo es la vida con su muerte y su eterno renacer
Todo es enorme y pequeño
Todo es eso y eso es todo
Todo son ellos, soy yo, sos vos...

El tatuaje de Emilia

En una cervical clave de sol, a punto de caer por tu espalda en musical cascada, tu cuerpo se hace melodía y la tinta canción.
Todos quieren hacer suya esa balada, tañir a besos tu piel, abrir a versos tu corazón.
Inútiles y hermosos intentos, desconocen  que ese pentagrama eterno no pertenece a  nadie de este mundo, ni siquiera al que a fuego lo marcó.
Esas notas que vuelan en tu piel y lloran en tu alma son para él, el único que las escucha... el que vive y te abraza a través de esa canción.

Reescribir

Quiero reescribirte en nuestra breve historia, hacerte más intensa, más lenta. El final no se podrá cambiar pero el transcurrir sería eterno, profundo.
Quiero reescribirte a miradas y caricias, a pasión y ternura, a abrazos, a besos. La tinta serán las lágrimas derramadas y así el libro será inmenso.

Escribir

Me gustaría escribir una historia de ángeles y demonios en la cual aquellos no sean tan perfectos y estos no tan malos. Una historia de un Dios que se equivoca y lo reconoce, de un Lucero que no cayó... de un hijo que fue escuchado.
Me gustaría escribir una historia con finales inesperados, donde los príncipes no sean tan azules y las princesas, a veces, tengan mal aliento.
Me gustaría escribir una historia humana, con seres que sean humanos que vivan, lloren, mientan, se sacrifiquen, traicionen y mueran. Y que amen, que amen mucho y odien otro tanto.
Me gustaría escribir una historia que se lea con los ojos cerrados, llena de palabras vivas que nos acaricien y también nos abofetéen...

Tres breves.

 La perla en el cielo

La luna es una perla, la huella de una lágrima.
Es la voluntad del poeta, que sabiéndola una roca condenada a reflejar una luz ajena, la ama y la extraña. La explora y la acaricia. Le habla y la escucha.
Le escribe...

Sabores lejanos

Un rayo dulce se posó en mi lengua dejándome el gusto que dejan siglos de vagar por el infinito. Sabor a mundos extraños, soles coloridos. El sabor galáctico, inconmensurable de tu piel.

Adiós

Te dejo el amor que sobra
Te dejo el recuerdo de tardes de mates y sexo
Te dejo ese beso ciego y prohibido en el baño
Te dejo esa mejilla surcada por esa odiosa caricia
Te dejo un verso inconcluso
Te dejo...

La cerradura

Y allí estaba la cerradura, leve destello en la penumbra, irresistible, el ojo se acopla... la visión lo deja mudo. Nunca sabremos si se asomó a los secretos de la vida o sólo vió una mina en bolas...