Vistas de página en total

martes, 18 de enero de 2011

Más allá, más acá.


Santos y demonios, ángeles y peces forman círculos entre las ruinas.
¡Majestuoso!
Hielo, leo y escribo, mano y adentro, adentro nada, ¿nada?
Todo mucho poco suficiente, no me alcanza revuelvo, sacudo y me sumerjo.
Vibro, vibro y vibrás.
Me miro y no me reconozco, sudo, mudo y dudo.
Es mucho, demasiado, me alcanza.
¡Salto!
Caigo en espirales de destellos multicolores.
Me sacudo el polvo de estrellas y me estrello,
Monto un caballo, se retoba y caigo y subo al más allá.
Nadie me espera, no me esperan, siempre estuve ahí (con ellas), nunca me despegué.
Me sacudo, salto y me revuelvo, sueño ¿o no? Realidad palpable ¡una mierda!
Sudo y escupo y me canso y no despierto. Y escribo y sueño y vivo y duermo y muero y caigo.
Salto y me sacudo, polvo, polvo de donde vengo y hacia dónde voy.
¡Alto! ¡Salí! ¡Volvé!
Y abro un ojo y me miro y me reconozco, PAZ.
Pero no logro creérmelo.
Me sacudo, salto y escribo y no tiene fin. ¿Será eterno? ¿infinito?
No creo y creo y quiero creer, y abro el otro ojo rojo me miro y exploto,
Estoy feliz y triste ¡vivo! y salto y me sacudo y eructo y lloro y río.
Ríos de sangre, de vino, de vida y muerte y ellas no me esperan.
No me esperan porque siempre estuve ahí… o ellas siempre estuvieron conmigo.

2 comentarios: